Las cámaras empresarias
argumentan que podría ser el fin de un régimen que, a su juicio, hasta el
momento viene funcionando bienLas cámaras empresarias argumentan que podría ser
el fin de un régimen que, a su juicio, hasta el momento viene funcionando bien
Crédito: Shutterstock
Sofía Terrile. 31 de julio de
2020
A pesar de los reclamos del sector privado, el Senado aprobó hoy la Ley de Teletrabajo. Las cámaras empresarias argumentan que será el fin de un régimen que, a su juicio, hasta el momento viene funcionando bien y que hay condiciones que harían "inviable" la opción de contratar a un teletrabajador.
El proyecto crispó los ánimos del sector privado, que fue invitado al debate, pero tarde. A mediados de este mes, hubo reunión de la Comisión de Trabajo del Senado en donde se escuchó a algunas entidades, como la Unión Industrial Argentina (UIA). "Es una verdadera lástima que, a pesar de que se logró visibilizar el tema y de que desde varias entidades hicimos un aporte para generar una mejor ley para todos, salió esta ley que no se entiende a quién quiere beneficiar", apunta Brenda Puig, líder de la Red de Abogados de Empresa de IDEA.
Para la abogada, a pesar de que la Comisión de Trabajo del Senado convocó a algunas entidades, no hubo una verdadera escucha de los reclamos que había. Añade que cada sector va a seguir trabajando para bajarlo a sus realidades y que espera que la reglamentación "atempere" algunas consecuencias de la norma aprobada hoy. "Es una ley que no reconoce cuál es la realidad del teletrabajo", suma Luis Galeazzi, CEO de Argencon, la cámara que nuclea a las empresas que trabajan en la economía del conocimiento. En las compañías de la institución que dirige "más del 90% de las funciones se realizan en modo teletrabajo" y asegura que nunca hubo conflictos laborales. "Al contrario, los trabajadores demandan más tiempo en modo home office", agrega. A su juicio, esta norma será una "fuente de litigios laborales" y "no ayuda en nada", especialmente "en un momento en el que es necesario crear más trabajo".
En diálogo con LA NACION,
representantes de cámaras de distintas industrias hicieron referencia a los
puntos que juzgan más polémicos sobre la ley. Tal como está planteada hoy, la
norma, que empezaría a regir 90 días después de que finalice el aislamiento
social preventivo y obligatorio, establece algunos criterios marco como el
derecho a la desconexión digital del empleado, la provisión de elementos de
trabajo y la reversibilidad, es decir, la condición que permite al
teletrabajador pasar a ser un empleado presencial en cualquier momento de la
relación.
"Las empresas no quieren
tener una cantidad de escritorios vacíos preparados para esta situación, nadie
quiere tener un costo hundido", señala Puig. "Esto da un nivel de
contingencia terrible y mata lo que ya andaba bien", añade. La abogada
explica que, tal como está redactada hoy la ley, se entiende que la
reversibilidad aplicaría solo a las personas que hoy están trabajando en
formato presencial y pasan al formato a distancia, pero que desean volver a su
antigua condición. Los colaboradores que luego se contraten en formato
teletrabajador no podrían hacer uso de este derecho.
El derecho a la desconexión
digital es otro de los puntos en los que hay grises en el debate del sector
privado. En condiciones extraordinarias, en las que el teletrabajo no se eligió
sino que se impuso por causas de fuerza mayor, casi un 40% de las personas que
está realizando sus tareas en esta modalidad durante la cuarentena admite que
está trabajando más horas que antes, según una encuesta de Quiddity, la
división de investigación de mercado, opinión pública y big data del grupo
Untold. Pero la norma no regulará para tiempos de aislamiento, sino para lo que
viene después.
El comentario generalizado es que debería haber cierta flexibilidad a la hora de plantear el derecho a la desconexión, o al menos cierta libertad para manejarlo en sectores donde hay emergencias fuera del horario de 9 a 18. Para Cessi, la cámara de empresas del software, por ejemplo, el derecho a la desconexión no sería un inconveniente, admite su presidente, Sergio Candelo, aunque admite que la rigidez a la hora de aplicarlo va en contra de la dinámica diaria en el trabajo del sector, en la que se puede dar, por ejemplo, que un colaborador esté en un momento de esparcimiento, "desconectado" parcialmente, durante su horario laboral.
Por otro lado, los consultados también pusieron en duda el artículo que refiere a las tareas de cuidadoPor otro lado, los consultados también pusieron en duda el artículo que refiere a las tareas de cuidado Crédito: Shutterstock
Para Puig, por un lado este
punto es injusto para quienes realizan tareas de forma presencial, pero también
implicaría una traba para el desarrollo profesional de las mujeres, hoy
mayoritariamente a cargo de las tareas de cuidado. El argumento de los
empresarios es que eso llevaría a que se privilegie contratar a hombres para
teletrabajar. Sin embargo, en la norma no está indicado que haya diferencias de
género ni que haya obligatoriedad de hacer uso de este derecho por parte del
empleado.
Finalmente, los líderes de las cámaras empresariales también se refirieron a lo que ellos consideran dos "errores" en la génesis del proyecto. Por un lado, consideran que se está legislando en un período extraordinario, en el que el teletrabajo adquiere algunas características que habitualmente no tiene, ya que en la normalidad prepandemia nadie estaba "confinado" en su hogar como hoy, para algo que entrará en vigencia cuando se vuelva a la normalidad (más específicamente, 90 días después de que termine el ASPO). "Teletrabajo no es igual a teletrabajar en pandemia", dice Puig.
Por el otro, aseguran que se sienten excluidos del debate, cuando en realidad son ellos mismos los que deben implementar la norma luego en sus espacios de trabajo. Claudio Cesario, presidente de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), afirma que el Congreso está a punto de hacer "fracasar" a la herramienta del teletrabajo. "Entendemos que los senadores tienen la obligación y el deber, antes de sancionar esta ley, de escuchar a todos los sectores que van a conformar el teletrabajo: empleadores, entre ellos empresas grandes y pymes, y trabajadores", sostiene.
No hay comentarios:
Publicar un comentario